sábado, 22 de octubre de 2011

Siempre es de Noche (Alejandro Sanz)

Cuéntame, como va cayendo el sol
mientras hablas pensare
que guapa estas que suerte ser
la mitad del cuento de un atardecer
que observo al escucharte
porque mis ojos son tu voz


acércate, que cuando estemos piel con piel
mis manos te dibujaran
tu aroma me dirá tu edad
junto a ti, unidos sin saber porque
seguramente se me note
el resplandor de una ilusión
porque a tu lado puedo olvidar


que para mi siempre es de noche
pero esta noche es como un atardecer
si logras que a la vida me asome
tus ojos sean los que brillen
y la luna que la borre
en mi eterna oscuridad
el cielo tiene nombre: tu nombre
que no daría yo por contemplarte
aunque fuera un solo instante


hace frió, es tarde y tienes que volver
hay alguien que te espera, seguro
una vez mas el tiempo se nos fue
volverás, dime si mañana volverás
como lo has hecho cada tarde
para contarme como muere el DIA


y se marcho, ella se alejo de el
pero como en las cartas
dos puntos posdata
se me olvidaba no me presente
solo fui testigo por casualidad
hasta que de pronto el me pregunto
era bella no es verdad
mas que la luna dije yo
y el sonrió


Nunca más se hará reproches
por intentar amanecer
no volverá a perderse en la noche
porque su alma hoy brilla con mas fuerza
que un millón de soles
pero su eterna oscuridad
a veces se le oye a voces
qué no daría yo por contemplarte
aunque fuera un solo instante
por intentar amanecer
no volverá a perderse en la noche
porque su alma hoy brilla con mas fuerza
que un millón de soles
pero su eterna oscuridad
a veces se le oye a voces
que no daría yo por contemplarte
aunque fuera un solo instante


qué no daría yo por contemplarte
aunque fuera un solo instante


Significado: Si tuviera que rescatar una historia de todas las que he vivido, probablemente, me quedaría con la única que nunca fue mía. Rozó mi vida sin apenas tocarla y me convirtió en testigo por casualidad de una de esas historias que se quedan suspendidas en el aire, a la espera de un final que no arranque a llorar tras contarla.

Él se llamaba Manuel. Era un tipo reservado y aburrido, de esas personas tan anodinas que, por fuerza, tienen que ocultar una historia grandiosa en su silencio. Ciego de nacimiento, solía decir que lo que más le costaba imaginar era el cielo. Apenas salía de su habitación, decía que ya no tenía ni fuerzas ni ganas de seguir peleando con el mundo.
Yo, que por aquella época estaba de prácticas en la residencia, sentía una enorme compasión por aquel hombre que, siempre en solitario, no tenía mayor entretenimiento que escuchar la radio y esperar que llegara la comida. Esta fue la razón principal de que convenciera a Manuel para apuntarse cuando el grupo de voluntarios inició su campaña de verano. Venían un par de horas por las tardes, para hacer compañía a los residentes que no tenían familia o que, aún teniéndola, no recibían apenas visitas.
Manuel refunfuñó cuando se lo propuse la primera vez. No era muy sociable y detestaba este tipo de iniciativas. Nunca me ha gustado la compasión, decía, no quiero dar pena. No obstante, el calor insoportable de su cuarto en verano y el aburrimiento terminaron por dar su brazo a torcer.

Ella se llamaba Julia. Manuel solía decir de ella que olía como los años cuando no pasan en vano. Luego, sonreía como si yo no pudiese entenderlo. La verdad es que nunca lo hice. Julia era una de las voluntarias. Apasionada las puestas de sol, acogió a Manuel nada más conocerle. No podía permitir que existiese una persona incapaz de imaginar el cielo, dijo una vez. Y, por eso mismo, todas las tardes bajaban a ver el atardecer. Si tuviese que rescatar el momento del día en el que el cielo está más hermoso, le decía, sería este sin duda. Manuel la escuchaba hablar de azules que se tornaban rojizos, de aquel sol que caía lentamente, de los violetas, de las nubes, de las estrellas que iban apareciendo tímidamente… Escuchaba embelesado las palabras de Julia, como si en aquel momento no hubiese nada más en el mundo que ellos dos y su atardecer. Estaba pletórico. Nunca antes le había visto de aquella manera, cada vez que escuchaba unos pasos por el pasillo, se giraba velozmente para ver si el olor de Julia delataba su presencia. Empezó a sonreír, a pedirme que le peinara antes de sus atardeceres, como él decía, a hablar con el resto de residentes. Julia y Manuel eran tan perfectos como la caída del sol. El cielo de Manuel ya tenía forma.
Un día, a finales de Agosto, Julia no apareció. Aún no había terminado el verano, pero algunos de los voluntarios habían dejado de venir, sin embargo, me sorprendió enormemente que Julia no apareciese tampoco al día siguiente. Ni al otro. Manuel estaba marchito. Me pidió que le ayudase a bajar al banco donde solían ver el atardecer y se quedó allí sentado durante las dos horas que antes contenían su presencia. Luego, volvió cabizbajo a su habitación. Los atardeceres no eran lo mismo sin ella. El cielo sin ella, no era nada.
Preocupado por Julia y, en consecuencia, por Manuel, me puse en contacto con ella. No fue su voz la que respondió al teléfono. Era su hijo. Julia había fallecido hacía tres días, victima de una enfermedad terminal que la tenía amenazada de muerte desde hacía dos años. Me gusta pensar que la historia de Julia y Manuel no terminó así. Él siguió acudiendo al banco para ver atardecer con los ojos que Julia le había prestado. Ya podía imaginar el cielo, porque el cielo había sido ella. Sé que, de alguna manera, era feliz recordándola.
El día que acabé mis prácticas en la residencia, subí a despedirme de Manuel. Su historia había significado para mí mucho más de lo que nunca llegaré a comprender. Él no estaba en su habitación pero, al mirar el reloj, supe donde encontrarle: en su banco, en su atardecer. Y, efectivamente, allí estaba. Me senté a su lado sin decir nada, maravillado por aquella puesta de sol tan mágica. ¿Era bella, verdad?, susurró Manuel de pronto. Más que la Luna, respondí. Y así, con una enorme sonrisa sentado frente a un atardecer cargado de magia, dejé a Manuel. Tal como sigue aún hoy, en mi recuerdo.

28 comentarios:

  1. La verdad no se si te has inventado la historia o noo...si significa realmente lo k canta Sanz realmente a mi m ha echo meterme realmente en la atmosfra de la canción =) ese verano la soledad de Manuel ect ha sido realmente un cumulo de sensaciones muy buena historia preciosa .... El final yo pensaba k ella tenia novio o algo pero realmente m ha desilusionado bastante!!pero bueno es mejor haber amado y perdido k nunca haber amado =D

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  2. wow si esta historia es cierta me gusta mas la cancion q antes... es mas mientras leo este post estoy escuchando la cancion.

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  4. Verdaderamente me ha desbaratado esta historia, no importa si es real o no lo es, se que existen millones de historias de enamorados de todo tipo todo el tiempo, en todo el mundo, por eso me hizo pensar en valorar las historias de la gente, sin duda todos tienen su historia de amor... y claro que llore como una niñita sin control al leer esta historia mientras escuchaba la canción recordando mi propia historia.

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  5. Qué bello y triste a la vez. Mientras escuchaba la canción de Sanz no pude evitar llorar.

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  6. Exelente me encantó la historia...

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  7. Uo, qué historia tan preciosa... me ha emocionado...

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  8. La historia más bonita que he visto nunca. Me ha emocionado

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  9. Una de las mejores historias que he conocido en la vida

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  10. Guau... te hace creer en el verdadero amor
    Magnifico...

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  11. Bellísima historia y va con la canción, ahora me gusta más y cuando la escuche los imaginaré sentados en el banco.

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  12. Hola! Esa canción la escuchaba cuando mi hermana ponía el disco y siempre me gustó porque me parecía complicada la letra, ahora con tu historia me parece melancólicamente perfecta. Gracias.

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  13. No sabia nada sobre esta historia, yo creía q el no era ciego realmente solo lo invento para q ella estuviera a su lado aunque sea un rato, gracias es una de mis preferidas

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  14. La verdad, da igual que sea o no real. Si no lo es, tienes el don de la escritura con alma. Y si, también llore. La canción es muy emocional pero acompañada de tu historia llega al alma. Gracias por compartir esta historia tan bonita. Felicidades

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  15. Es una historia sin duda muy hermosa y me robo no una sino varias lágrimas de solo imaginar estar presente en esas vivencias..

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  16. Tengo entendido que esta anécdota la contó el mismo Sanz en una entrevista... Es una historia real donde fue testigo de un "amor a ciegas", le prometió al hombre escribir sobre ellos, éste no le creyó ni siquiera que era Sanz (jaja), y miren la belleza de canción... Me quedo con la frase "Que no daría yo por contemplarte aunque sea un solo instante". Lindo, no?

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  17. EL CIELO TIENE NOMBRE, TU NOMBRE!!!!

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  18. La canción me quedi en la mente por la letra complicada..Siempre sospeche q era una historia de amor.Es muy emocionante.Te saca lagrimas.

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  19. Yo ya la había leído antes ya qué la canción me encantó desde él primer día que la escuché y le busque él significado y me encontré con está hermosa historia

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  20. Hola!!! Tengo mas de 20 años que escuche por primera vez la cancion y el comienzo o la primera parte la entendia, la segunda parte no, despues de tantos años me decidi a buscar el significado y ahora que lei la historia, ahora la comprendo, muchas gracias!!!... Y al igual que al resto que a los demas me conmovio mucho.

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  21. Hola!!! Tengo mas de 20 años que escuche por primera vez la cancion y el comienzo o la primera parte la entendia, la segunda parte no, despues de tantos años me decidi a buscar el significado y ahora que lei la historia, ahora la comprendo, muchas gracias!!!... Y al igual que al resto que a los demas me conmovio mucho.

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  22. Ah qué cosas, siempre pensé que el había fallecido y no ella...

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